viernes, 4 de febrero de 2011

Nono, el príncipe de sangre, su historia .-

Nono deambula por el desierto buscando sus orígenes.  Buscando aquellos ya casi olvidados momentos de esplendor y bienestar, de alegría y tranquilidad, aquellos momentos en los que gracias a sus fuerzas protectoras, transitaba por entre los campos de labor para atraer a la lluvia, o conminaba el influjo de la luna para el buen puerto de los embarazos.  Eran días de vida intensa, en los que el príncipe de sangre se sentía guardián de aquella pequeña humanidad que confiaba en él.  Los campesinos le pedían ayuda para sus cosechas, las mujeres consejos para el amor, y los niños juegos con los que aprender.

Hoy todo eso se ha perdido, ha quedado atrás, solo permanece el hastío:  en unas manos vacías sin nada que ofrecer, en unos campos yermos y agrietados, en unos árboles resecos sin fruta que dar.

Pero él está seguro que todavía existe alguna esperanza.  Y eso es lo que siente cuando encuentra unos lirios que inesperadamente florecen de entre los terruños más secos.  Su corazón late a otro ritmo y como la lluvia que ahora obedece a su llamada, Nono también comienza a llorar.

2 comentarios:

  1. no puedo decir otra cosa, que no sea repetición de mi anterior comentario, son impresionantes tus acuarelas y la historia del principe de sangre...., no sé que decir, porque para mi es algo imposible tener esa imaginación,
    un beso y que no se te agote nunca esa fantasia

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  2. Eres un artistazo, cuando expones?

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